SAN MARTINHO EN
CASA DE ELIA Y ANTÓNIO GONÇALVES
He perdido
la cuenta de los años que llevamos celebrando San Martinho en la Adega de Elia
y António Gonçalves.
Cada 11 de
noviembre, puntual a la cita, decenas de amigos (portugueses, españoles y de
alguna que otra nacionalidad más), nos reunimos en torno al vino nuevo que
produce anualmente nuestro amigo António, corriendo el blanco, el tinto y el
bagaço por nuestras gargantas como una bendición del entrañable dios Baco.
Y en medio
de las variadas viandas que unos y otros aportamos, entre las que destacan la
buena cocina y la repostería sin rival de los alentejanos, surge el canto
profundo de fados ancestrales, acompañados de guitarra, viola, acordeón, que
llenan el ambiente de música y poesía de alta calidad.
A veces nos
atrevemos a introducir algún poema, alguna canción extremeña, española en
general, un ligero discurso, algún chascarrillo que distiende el ambiente, que
con el fado se va haciendo solemne, nostálgico, subiendo a desgarrado. Pero se
vuelve al lujo sin par de la canción portuguesa que tiene en nuestros amigos de
Campo Maior y alrededores virtuosos sin cuento, que se van sucediendo en las
intervenciones.
Alguna vez
he hecho referencia a estos sucesos:
Nuestro
buen amigo António Gonçalves y el extenso puñado de artistas que le rodean son
asiduos de festivales y encuentros por nuestra geografía rayana, y siempre
están dispuestos a compartir su emocionante, timbrada voz en reuniones de
amigos, en acontecimientos sociales, culturales, cuando se lo solicitamos.
Es un honor
volver siempre a la Adega, compartir el milagro renovado cada año del vino que
renace, emocionarnos con la calidez y calidad de la voz de los fadistas, con el
rasgar de sus guitarras, la dulzura del acordeón, en tanto damos cuenta del arroz
com lebre, costelas de porco, chouriço, lingüiça, queijo, azeitonas… bolo de
bolacha, pudim de ovos, pastéis de nata…
Queda
siempre la amistad renovada, y las ganas de volver a un encuentro como éste,
con San Martinho o sin él, con los amigos siempre, con la entrañable
concurrencia llena de arte y bondadosa sencillez.
MOISÉS CAYETANO ROSADO
Buenas noches: Estuve en Elvas viendo el Museo del Ejército que me gustó muchísimo. Me he suscrito a este Blog que seguiré atentamente. Solo le pido una cuestión, si es posible: recibir las entradas en el mail adolfo.rovira@hotmail.com ¿Será posible?. Muchas gracias.
ResponderEliminarLa dirección de este Blog me la dieron sus buenos amigos del Museo. Saludos.
ResponderEliminarGracias. Tomo nota del correo para envíos, en la medida en que "sepa" hacerlo pues no tengo ligado el blog a envíos automáticos.
EliminarUn saludo.
Moisés