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jueves, 28 de marzo de 2019


HISTORIA DE MÉRIDA

Editores: Juan Carlos López Díaz, Javier Jiménez Ávila y Félix Palma García.
Coordinador: Juan Carlos López Díaz.
Edita: Consorcio de la Ciudad Monumental Histórico-Artística y Arqueológica de Mérida. 2018. Dos tomos: 849 y 650 páginas.

El Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida, que -como dice su director, Félix Palma García- “está para Investigar, Conservar y Difundir el Patrimonio Histórico y Arqueológico de la ciudad de Mérida” (pág. 11, Tomo I), decidió emprender una obra monumental bajo la coordinación del doctor en Historia Juan Carlos López Díaz: una Historia general de Mérida, bajo el enfoque de especialistas de primera línea en los distintos aspectos a tratar.
Veintiséis investigadores de reconocido y experimentado prestigio han dado forma a dos volúmenes con un total de 1.499 páginas donde se contiene aquello que de una u otra forma hemos podido ir conociendo de forma dispersa, fragmentada o más ligera en distintas publicaciones y épocas, conformadas en nuevas aportaciones específicas para la publicación, generando una obra coral imprescindible para el conocimiento de la ciudad, su entorno y legado.
Se abre el conjunto con un estudio de su medio físico y natural, para cerrarlo con otro trabajo geográfico sobre la situación actual de la ciudad de Mérida, características socio-demográficas y económicas, a cargo de los geógrafos de la Universidad de Extremadura Julián Mora Aliseda, Jacinto Garrido Velarde y Consuelo Mora.
El resto de los trabajos, veinticinco, se encuadran dentro de los estudios históricos, y sobre ellos podemos establecer unos diversos bloques cronológicos:
Tres primeros capítulos bibliográficos y documentales, a cargo de Juan Carlos López Díaz, Agustín Velázquez Jiménez y Magdalena Ortiz Macías junto a José Antonio Peñafiel González (que estudian el Archivo Municipal como fuente documental).
Mérida anterior a la Augusta Emérita es tratada en dos capítulos por Javier Jiménez Ávila y Teresa Barrientos Vera uno y Francisco Javier Heras Mora el otro, con abundante información y documentación arqueológica.
La Mérida netamente romana ocupa tres capítulos a cargo de Félix Palma García, Macarena Bustamante-Álvarez y Francisco Javier Heras Mora, si bien el siguiente, que trata del período entre el Imperio y la conquista islámica (a cargo de Tomás Cordero Ruiz), presenta igualmente amplia documentación y legado arqueológico romano, prolongándolo en este caso hacia el visigodo.
Sobre la época visigoda propiamente (siglos VI y VII) es la siguiente entrega, de María Cruz Villalón, siguiéndole dos trabajos de la Mérida islámica, a cargo de Miguel Alba y Bruno Franco Moreno, que sucesivamente tratan los siglos VII-IX y X-XIII.
Tres capítulos cierran el Tomo I, referidos a la época cristiana, conduciéndonos por la conquista cristiana de Mérida en 1230 (de David Porrinas González); la propiamente Mérida cristiana, que trata Manuel López Fernández, y la presencia de la Orden de Santiago (siglos XIV y XV), a cargo de Ángel Bernal Estévez.
El apartado de Bibliografías, compartimentado por capítulos, ocupa las 89 páginas finales, ofreciéndonos un amplísimo abanico de referencias de ampliación general y específica de Mérida, que nos da idea de la densidad de estudios relacionados.
El segundo tomo, que como el primero se nutre fundamentalmente de investigadores de la Universidad de Extremadura, la Junta de Extremadura, el Ayuntamiento de Mérida y el Consorcio de la Ciudad Monumental, va revisando cronológicamente la Historia Moderna y Contemporánea de Mérida, encargándose Alfonso Rodríguez Grajera de los siglos XVI y XVII; Santiago Aragón Mateos del siglo XVIII; Fabián Lavado Rodríguez de las Guerras de Separación (Restauração) de Portugal, Sucesión a la Corona española y de Independencia en Mérida (siglos XVII-XVIII-XIX); José Caballero Rodríguez del Período Liberal (1833-1874); Antonio Rodríguez Iglesias de la Restauración Borbónica, con todo su trasiego de turnismo y oscuro caciquismo, y otra vez José Caballero Rodríguez de las transformaciones socioculturales en el tránsito del XIX al XX; por su parte José Montero Omenat también trata este tránsito, pero estudiando la población de Mérida, abarcando las tablas que expone sobre nacimientos, fallecidos y saldo vegetativo de 1810 a 2000; ese tránsito entre ambos siglos será igualmente objeto de consideración en el trabajo de Francisco Barbudo Gironza, en cuanto a la evolución desarrollo y planes urbanísticos, con los consiguientes cambios socio-económicos de la ciudad.
Los tres últimos capítulos corresponden al siglo XX, centrándose los dos primeros -firmados por Juan Carlos López Díaz- en la II República y Guerra Civil el primero, y en el período franquista el segundo, llegando hasta las elecciones del primer Ayuntamiento democrático, en 1979. Y, como quedó dicho más atrás, el último capítulo corresponde a la situación socio-demográfica y económica actual, hasta comienzos del siglo XXI.
Treinta y una páginas de bibliografía -más unos apuntes bio-bibliográficos de los autores- cierran la publicación, que es un ejemplo de tratamiento de la “historia local” que, como se apunta en la Introducción, “no contó en el pasado con gran prestigio; podría incluso decirse lo contrario /…/ ya que habitualmente el relato de lo acontecido en el territorio más cercano fue elaborado durante décadas de forma similar a los cronicones modernos, con mucha erudición detallada, pero escaso análisis” (pág. 15. Tomo I), pero que “cuando hoy se emprende el estudio del pasado de una localidad se hace con una metodología y un planteamiento epistemológico que en nada difieren de los utilizados en la, digámoslo, historiografía general” (pág. 16. Tomo I). Y así se ha concebido y elaborado esta Historia Total, digna de obliga consulta y de ejemplo para otros.
MOISÉS CAYETANO ROSADO

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