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martes, 5 de diciembre de 2017

FORTIFICACIONES PORTUGUESAS EN MARRUECOS (y II)
Siguiendo hacia el sur de la costa oeste marroquí, tras haber pasado por esos “hitos” de visitantes y turistas que constituyen esencialmente Tánger y Arzila -sin dejar de visitar Ceuta- nos enfrentamos con otro conjunto de fortalezas edificadas o reestructuradas por “manos” portuguesas, y que nuevamente la recurrencia a la sabiduría de Frederico Mendes Paula nos facilita su comprensión. Vamos a ir ahora de abajo hacia arriba, de Essaouira a Mazagão, como antes lo haríamos de arriba hacia abajo, desde Ceuta a Arzila, pasando por Tánger.
En 1506, D. Manuel ordenó a Diogo de Azambuja la construcción de un fuerte de estilo Manuelino llamado Castillo Real de Mogador en el local de la actual ciudad de Essaouira. Esta población -igualmente costera, mucho más al sur, a la altura de Marraquech- es de una especial belleza. Patrimonio de la Humanidad, conserva la traza amurallada portuguesa con bastante integridad y autenticidad, siendo sus vistas hacia el mar inolvidables, y esperándonos en su interior, al borde de las murallas sus magníficos puestos de pescado, y hacia dentro su entrañable medina, apacible, llena de recovecos y agradables sorpresas.
Essauira. De fortaleza portuguesa. Patrimonio de la Humanidad.
En Safim -yendo de Essaouira hacia el norte- el sultán de Fez estableció una factoría, siendo un importante centro comercial en el siglo XV. Pero en 1508 Diogo de Azambuja aprovecha el clima de desunión existente y la transforma en fortaleza, tomando al asalto la ciudad cuando un grupo de habitantes le pide protección. Durante la ocupación portuguesa de Safim, se construye una cintura de tres kilómetros de murallas, proyectada por los hermanos Diogo y Francisco de Arruda.
En 1514 los hermanos Diogo y Francisco de Arruda son llamados a una intervención en las murallas de la ciudad de Azamor, que  desde 1486 convirtieran sus habitantes en vasallo del rey de Portugal D. João II.
Mazagão (El Jadida)
En ese mismo año es fundada Mazagão, en el lugar donde D. Jaime, Duque de Braganza, había desembarcado para conquistar a Azamor. Fue el propio D. Jaime quien convenció a D. Manuel para construir allí una fortaleza. Después del abandono de las plazas de Safim y Azamor, las defensas de Mazagão son completamente remodeladas, para garantizar un punto de apoyo seguro para las flotas que hacían la Ruta del Cabo.
Así, desde la toma de Ceuta en 1415 hasta la fundación de Mazagão en 1514, Portugal crea una red de plazas fuertes en la costa marroquí, ya sea a través de la conquista de ciudades existentes, o de la construcción de ciudadelas o fuertes en lugares de importancia estratégica, que hoy son un patrimonio de visita indispensable para los amantes de la historia de las fortificaciones, del arte en general y de las construcciones defensivas en particular.
Para un conocimiento detallado de toda esta red de construcciones portuguesas en la costa marroquí, que sirva de guía más que provechosa a cualquier visitante reposado, nada mejor que entrar en el blog de Frederico Mendes Paula https://historiasdeportugalemarrocos.com/author/fredericomendespaula/, de una precisión, rigor y amenidad verdaderamente encomiables.

Moisés Cayetano Rosado

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