sábado, 31 de mayo de 2025

 Presentación del libro »De los hombres sin tierra a la tierra sin hombres» en el Hospital Centro Vivo de Badajoz


Por Antonio Maqueda Flores
(En la Revista AZAGALA/Alburquerque, edición digital. 31 de mayo de 2025)

Con una gran asistencia de público, se celebró en la tarde del día 28 de mayo la presentación de la obra de Moisés Cayetano osado “De los hombres sin tierra a la tierra sin hombres” en el Hospital centro Vivo de Badajoz. En el acto se entregó a todos los asistentes ejemplares de esta obra, la número 28 de la revista O PELOURINHO, publicada por la Diputación Provincial de Badajoz.

  Posteriormente, el propio autor de la obra dio paso a las intervenciones de dos de los personajes históricos más importantes tanto de la Revolución de los Claveles de 1974 como de la posterior Reforma (Revolução) Agraria de 1975: Vítor Pássaro (furriel del Ejército portugués) y João Andrade da Silva (entonces teniente, y posteriormente coronel, del Ejército luso). Tal como señaló Moisés, su presencia en el acto obedecía mayormente a su gran implicación en la Reforma Agraria portuguesa, pues en ella se centra gran parte de la obra presentada. Destacó a Andrade da Silva como “el militar más implicado, más comprometido y más valeroso”, con continuas tomas de decisión “sobre el terreno, no desde un despacho”, en palabras de nuevo del autor de la obra, quien ha estudiado en profundidad los acontecimientos que dan base al ensayo histórico presentado.

  Por su parte, Vítor Pássaro calificó la obra de Moisés como “un estudio exhaustivo y bien documentado sobre las Reformas Agrarias de España y Portugal”. Centrándose en su experiencia, habló de las perspectivas de desarrollo que se abrieron tras la Revolução dos Cravos del 25 de Abril de 1974, entre las que se encontraba el inicio de una necesaria Reforma Agraria, tan solo “parcialmente concretizada” y que posteriormente “sufreu um duro golpe” por la conocida como ‘Ley Barreto’ de 1977. Habló del ansia de consolidación del “novo regime saído da Revolução”, que permitió, por primera vez, que los trabajadores agrícolas comenzaran a ocupar las tierras sin cultivar, los extensos baldíos, en este caso, de la vecina región portuguesa de Alentejo, en manos de  grandes propietarios. Señaló el apoyo que estas ocupaciones tuvieron por parte de las poblaciones locales con la organización de “brigadas de trabalho voluntar”, contando, por el contrario, con la reacción agresiva de los latifundistas.

  Habló Pássaro de la organización de iniciativas (“operações”, en lenguaje militar) para intentar encontrar soluciones para los problemas de los trabajadores agrícolas con la ocupación de fincas improductivas y la creación de “Unidades Colectivas de Produção” con la dinámica de “trabalhar a terra”, obteniendo muy buenos resultados durante varios años. Sin embargo, estas acciones siempre contaron con la oposición de las fuerzas gubernamentales y de la “direita de então”, llegando al uso de la fuerza y provocando la muerte de algunos trabajadores.

  Concluyó señalando el reconocimiento general de que en los procesos de ocupaciones de tierras en Portugal no hubo situaciones graves entre propietarios y trabajadores, en lo que tuvo mucho que ver la intervención a nivel organizativo de las fuerzas militares que apoyaban el proceso. Finalmente, Pássaro tuvo unas palabras de agradecimiento a Moisés Cayetano por la realización del excelente trabajo de investigación que en el acto se presentaba.

  Prosiguió el acto con la intervención del Coronel João Andrade da Silva, quien, de manera vehemente, defendió la verdad histórica de la Revolução Agrária que él mismo protagonizó, habiendo sido encarcelado durante tres años tras un proceso “vergonhoso” de seis años. Habiendo sido tildado de “ingovernábel” por sus detractores y perseguidores, el Presidente de la Asociación Salgueiro Maia manifestó que tan sólo le gobierna “la justicia, la ley y la razón”, los valores que le mueven, y sobre ellas, “a ética e a liberdade”. Dirigiéndose a Badajoz, y a Moisés Cayetano en particular, recordó cómo Salgueiro Maia decía que “todos somos Capitães de Abril” si luchamos por la libertad y la paz, por el desarrollo de nuestras regiones.

  Ya centrándose en la obra presentada, dijo Andrade da Silva que el libro de Moisés Cayetano analiza la tremenda injusticia que siempre ha supuesto el sometimiento de los hombres a los que no se les permitía poseer tierras. Habla de la necesidad de la lucha, como la que en la obra presentada se analiza, a ambos lados de la Raia/Raya, lucha que en el caso portugués -dice- les llevó 400 días, en los que oyó y vio, sobre el terreno, la revuelta de los trabajadores alentejanos para que las tierras “comenzasen a ser trabajadas de manera inteligente y justa”, al contrario de la manera injusta y errada en que ocurría con los latifundios, con cientos de hectáreas improductivas, sin beneficio alguno para los necesitados de tierras que trabajar para proveerse del necesario sustento.

  Sobre todo ello nos instruye la obra de Moisés Cayetano “De los hombres sin tierra a la tierra sin hombres”, en la que -dice Andrade da Silva-, con valentía y por primera vez, se habla de enfrentamientos que él mismo, como militar interviniente, tuvo con autoridades que le acusaban de no tener compromiso, cuando el compromiso para el entonces teniente era “com o povo”, con un pueblo necesitado de justicia y pan, en una situación en la que “si tuviese que morir por la Revolução quiero morir en tierra alentejana”.

  Acabó su intervención Andrade da Silva apelando a la necesaria contribución de todos, por medio de la lectura de la obra presentada del profesor Moisés Cayetano, para la necesaria “liberdade, democracia, justiça, solidariedade, pão, habitação e saúde”, todos derechos humanos que a todos corresponden.

  Llegado el turno del autor, y como continuación a la intervención de Pássaro y Andrade da Silva, Moisés Cayetano comenzó señalando la escasa divulgación del papel de los militares en la “Revolução Agrária” portuguesa, al contrario de lo que ocurre “con la presencia del Partido Comunista [portugués], las organizaciones agrarias, los sindicatos, en las ocupaciones de tierras, en los repartos y en la administración [de las mismas]”. En la obra se desarrolla ampliamente dicho papel, otorgándole la entidad merecida.

  Destacó igualmente el hecho de las desamortizaciones liberales del Siglo XIX como factor determinante en la distribución y posesión final de millones de hectáreas de terrenos baldíos que, como es sabido, no acabaron en manos de aquellos que trabajaban la tierra, perpetuando la mencionada “hambre de tierras” que tantos conflictos generaría históricamente a ambos lados de la Raya, sino que volvían a manos de muchos de los propietarios anteriores tras públicas subastas a las que nunca podían aspirar los “campesinos que se morían de hambre”. En todo caso, se produce, como concluye Moisés Cayetano, un cambio de propiedad de las tierras “de unos poderosos hacia otros poderosos” -en el caso de las desamortizaciones-, en gran parte, de la Iglesia a “los nuevos ricos tras la industrialización de finales del siglo XVIII y el siglo XIX”.

  Otro aspecto importante de la obra es la aportación de referencias y fragmentos de obras literarias de autores de la Raya, destacando “Jarrapellejos” (1914), de Felipe Trigo y “A Planície heróica” (1927), de Manuel Ribeiro. Señala el autor la falta de tierras para los más pobres como el origen de la necesidad de emigración que se produjo, de manera destacada, en las zonas pobres de Alentejo y Algarve, de Extremadura y Andalucía, principalmente, a lo largo del siglo XX. “De los hombres sin tierra a la tierra sin hombres”…

  En su didáctica intervención, el Profesor Moisés Cayetano ilustró la realidad de la ocupación de tierras durante la Segunda República con fragmentos de declaraciones de políticos de todo signo político que entendían, al menos, el intento de Reforma Agraria en la España del referido periodo prebélico. Se refirió el autor también a otro modelo de supuesta reforma agraria, el de los Planes de Desarrollo como el de Badajoz durante la dictadura de Franco. Siguiendo con las referencias literarias, leyó el Profesor un fragmento de un artículo de Jesús Delgado Valhondo publicado en el periódico HOY en 1968 referido a la pobreza y el hambre de los niños [descalzos] extremeños donde se evidencia la realidad de necesidad del pueblo llano. Una realidad que ilustra también con el relato breve de una incursión del periodista Luis Bello en 1929 a la única escuela pública en Portalegre, dentro de su obra “Viaje por las escuelas de España”. La Raya une realidades.

  Posteriormente explicó el autor que “la Reforma Agraria Portuguesa no fue cortada por un golpe militar, sino que fue cortada por Decretos posteriores -a pesar de que en la Constitución [portuguesa] de 1976 se consagra la Reforma Agraria como modelo productivo-, a través de una represión brutal de la GNR (Guardia Nacional Republicana), lo que llevó a la muerte lenta de la Reforma durante doce años en el país vecino, produciéndose, al igual que en España, la devolución de tierras previamente expropiadas a los iniciales propietarios, incluyendo muchas veces  los beneficios obtenidos.

  Concluyó la presentación el Profesor Moisés Cayetano indicando que, entre los años 1951 y 1975, las tierras lusas de Alentejo y las extremeñas perdieron el 50% de su población debido a la necesidad de emigrar de todos aquellos “hombres sin tierra”, necesidad que acabó por dejar “la tierra sin hombres”.

NOTA: Aquellas personas que deseen ler el libro y no tengan acceso a la edición impresa, pueden leerlo, descargarlo, imprimirlo, compartirlo, etc. en uno de estos enlaces:

https://dialnet.unirioja.es/ejemplar/693250

https://www.academia.edu/128597743/DE_LOS_HOMBRES_SIN_TIERRA_A_LA_TIERRA_SIN_HOMBRES_pdf_definitivo

https://drive.google.com/file/d/1JRsiJKEzYf1rzLoTRvhDX8FgpxYRTt2W/view?usp=drive_link