lunes, 30 de septiembre de 2013

FORTIFICACIONES DE SETÚBAL CONTRA PIRATAS, CORSARIOS Y ESPANHOIS
Moisés Cayetano Rosado 
El recinto medieval de Setúbal se circunscribía a la zona central, nuclear, de la población actual.. Serán los límites resguardados por murallas mandadas levantar por D. Afonso IV y terminadas bajo su sucesor, D. Pedro I, en el siglo XIV, para defenderse de los corsarios y piratas norteafricanos.
En 1582, el rey Felipe II de España (ya rey de Portugal con el nombre de Filipe I), ordenó la construcción de la fortaleza de São Filipe, tras vencer al Prior de Crato, D. António, por el que había tomado partido Setúbal a raíz de la crisis dinástica. Se trataba de una enorme fortaleza artillera, abaluartada, defensiva de la cuenca del Sado, con una situación geoestratégica privilegiada en un morro al noroeste de la población, completamente bajo su control.
Pero el 1 de diciembre de 1640 es aclamado rey de Portugal D. João IV, que se hace con el control de la población y proyecta nuevas murallas, de tipo abaluartado. El ingeniero militar francés Nicolau de Langres, diseñará las trazas del recinto fortificado abaluartado en los primeros años de la Guerra de Restauração.
Hasta 1696 se desarrollará un plan constructivo, financiado por los negociantes de la sal y por la población de Setúbal a través de nuevos impuestos. Así, se completa un cinturón de murallas, con el refuerzo de los Fortes Velho y da Estrela al norte, y perfeccionamiento general de los baluartes, fosos y obras coronas al este y oeste, proyectándose hornabeques al norte y este, que hacían de la fortificación una maquinaria defensiva de enorme relevancia, con once baluartes y dos medios baluartes.
Llegamos, así, al siglo XVIII con un amurallamiento y defensas exteriores que sitúan a Setúbal en primera línea de las fortificaciones de la Península ibérica. Fortificaciones que se completarán en la línea de costa con fuertes tan importantes como el de Albarquel y Santiago do Outão, en la zona norte del Sado.
¿Qué queda hoy día de todo este Patrimonio Histórico-Artístico Monumental? Fundamentalmente, el Forte de S. Filipe -revitalizado con el funcionamiento de una hermosa y activa Pousada-, así como algunos restos de los baluartes del recinto central y vestigios del Forte Velho.
El Forte de S. Filipe es una auténtica joya de las primeras construcciones abaluartadas, con traza del arquitecto e ingeniero militar italiano Filippo Terzi y acabado del también italiano Leonardo Torriano, que se hizo cargo de las obras al fallecer el anterior; realizó una batería baja de refuerzo João de Saldanha a mediados del siglo XVII.
Mirado desde abajo, desde la playa fluvial, parece un gran barco encallado en lo alto de una montaña. Acercándose a él, el portento de sus enormes paredones y su foso profundo, sobrecogen. Dentro, el espectáculo del paisaje que se domina resulta indescriptible: la belleza de la ciudad a sus pies; la enorme masa vegetal de la Serra da Arrábida y la extensa planicie que lleva al Alentejo, por detrás; la extraordinaria duna de Tróia, el estuario del río Sado y el mar, hacia delante…
El Forte Velho, o de São Luís Gonzaga, se ejecutó a consecuencia de la Guerra de Restauração, bajo traza de Luís Serrão Pimentel, militar e ingeniero portugués, que trabajó fundamentalmente en las fortificaciones de Alentejo y fue un importantísimo tratadista de los métodos de fortificación abaluartada. Hoy día presenta un preocupante estado de abandono, pese a su importancia histórica y artística, estando en gran parte en ruina e invadido de maleza; su contemplación en mapas de Google nos hace ver su relevancia: planta pentagonal  perfecta, con baluarte muy agudo en cada pico y glacis exento, que pide “a gritos” una rehabilitación y puesta en uso como museo de las fortificaciones de Setúbal.
El Forte da Estrela, desgraciadamente, se ha perdido, como ha ocurrido con buena parte de las cortinas y baluartes del recinto principal, si bien se conservan algunos tramos cuya puesta en valor también serían de gran importancia para la valorización integral  histórico-artística de la ciudad.
Es el caso de los baluartes de: Conceição y Livramento al sur, a la orillas del Sado; Santo Amaro y da Saude, al noroeste;  S. António y S. João, al noreste, y S. Domingos al este.

Un “tesoro”, en fin, importantísimo, digno de admirar y mejorar. Oferta clave turístico-cultural de Setúbal (que tanto patrimonio urbano y eclesiástico posee, sin olvidar la importancia de su envidiable mercado de abastos, tan bien surtido de excelente pescado) y punto de arranque del muy atractivo conjunto de fortificaciones de las estribaciones de la Serra da Arrábida.
(Ver panorámica en vídeo desde el Forte de S. Filipehttp://www.youtube.com/watch?v=RNMFxyUt5TI&feature=youtu.be)

2 comentarios:

  1. Como de costumbre, tu trabajo sin fisuras, con plantas históricas, vistas, fotos y comentarios con conocimiento, pero por sobre todo la voluntad y capacidad de divulgación, que no todos los que están capacitados ejercitan, y que habla bien de ti como persona.

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    1. Muchas gracias, por tu generosidad para con mis trabajos. Un abrazo. Moisés.

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